Nora golpeó la puerta hasta que sus manos comenzaron a vibrar.
En aquel momento incontables sentimientos inundaban su corazón (si es que
quedaba de él). Sentía cómo sus ojos ardían, cómo sus puños temblaban de ira, y
cómo un nudo se formaba en su garganta, amenazando con no deshacerse jamás. En
el exterior, fuera de su habitación, su madre estaba siendo torturada a manos
de un monstruo. Escuchaba los gritos desgarradores que emitía su madre y sentía
que con cada uno de ellos perdía la poca fuerza que conservaba. También sentía
las palpitaciones de su corazón; estas parecían estar poseídas por una fuerza
inhumana capaz de romper sus costillas para abrirse camino y huir al exterior,
a otro lugar, a otro mundo. De repente, los gritos cesaron y una vaga sensación
de alivio la recorrió. Por otra parte, intuía que la causa de aquel silencio
repentino no era nada agradable. Había perdido a su padre diez años atrás en la
guerra y no quería que pasara lo mismo con su madre, no quería perder a aquella
mujer sobreprotectora, a aquella mujer de pelo cobrizo y delicadas pecas
anaranjadas esparcidas por sus pómulos, a aquella mujer que la había ayudado a
levantarse en sus interminables caídas y a aquella mujer que, durante los diez
años siguientes a la muerte de su padre, había tenido que asumir dos papeles y
aguantar el peso de infinidad de cosas sobre sus hombros.
lunes, 24 de noviembre de 2014
Conferencias informativas sobre lesiones medulares en adolescentes
Cursos participantes: 1º ESO y 4º ESO
Desde hace siete años el IES Odiel en colaboración
con la asociación AESLEME viene realizando una campaña de prevención de
accidentes “Te Puede Pasar” dirigida a sensibilizar a los niños y jóvenes
en la prevención de la lesión medular y
cerebral. La edad escolar es el mejor momento para incorporar hábitos de
conducta seguros, que conformen ciudadanos responsables.
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