Tener más de 300 palabras.
Contener tres frases en común.)
Desde lo alto de un árbol en el patio de mi casa visualicé todo el entorno. Al frente, entre eucaliptos, el río Odiel; a la izquierda el puente de hierro que ahora es una vía verde pero hace muchos años fue una vía férrea que cruzaba el río. Era una línea ferroviaria que finalizaba su trayecto en Ayamonte. Mi madre decía que cuando era como yo iba a la playa de la Antilla en ese tren y que siempre iba cargado de turistas extranjeros (“guiris” es como se les llamaba a estos viajeros) cuyo destino era Portugal. A la derecha otro puente cruzaba el río, el de la carretera nacional A-49 y que se le llama “El Desvío” y al barrio que colinda con éste se le denomina “El Puente”. Las cigüeñas sobrevuelan continuamente el río y sus orillas para buscar ramas, que transportan en sus potentes picos, para hacer sus nidos en los campanarios del Convento del Vado, en la torre de Santiago, en el campanario de San Juan, en las estructuras metálicas que sirven de soporte a los cables eléctricos y también en los troncos de las palmeras que han perdido sus copas a causa de una plaga de gusanos rojos.